También en la vida, el camino hacia la excelencia consiste en intentar hacer cotidiano, lo que un día fue extraordinario.
domingo, 28 de septiembre de 2014
lunes, 22 de septiembre de 2014
Nueve meses de espera
Para un Leo como yo es duro contemplar los últimos rayos de sol de este verano. Signo de Fuego, astro el Sol y estación el Verano.
Esta madrugada, al entrar el equinoccio de otoño, comenzará una larga cuenta atrás de nueve meses hasta que pueda volver a cargar mis pilas. Empiezo a contar...
viernes, 19 de septiembre de 2014
No me despiertes
Si me encuentras sumido en mi universo de fantasía y color, puedes acompañarme, si lo deseas. Pero por favor, no me despiertes...
lunes, 15 de septiembre de 2014
Mientras los demás duermen
Los hogares apagan sus luces sigilosamente, con cuidado de no hacer ruido que pueda romper la intimidad de la noche. Los vehículos no circulan, sus motores descansan. ¿Qué queda en la noche?
Fuera de las luces de la madrugada queda la oscuridad. No es un oscuridad vacía, sino repleta de tantas historias como personas no se ven. Historias escondidas que la luna se encarga de contar en su reflejo.
¿Qué queda en la noche? Queda pasión, emoción, secreto, mentira, brillo en los ojos...
Es hora de escribir.
martes, 9 de septiembre de 2014
Río de Janeiro-New York
¡Vaya! Otra vez he salido a correr a deshoras. Corro solo. Solo, pero acompañado de mis pensamientos.
Merece la pena salir tarde. Esto de correr por la playa de Ipanema es todo un lujo. El Atlántico Sur me refrigera con su brisa. El reflejo de la luna llena, hoy también superluna, se difumina sobre la cresta de las olas. Y allí a lo lejos, majestuoso, iluminado: el Cristo Redentor de Corcovado. No se puede pedir más.
¿De día? De día también es bonita. Además tiene el añadido de estar repleta de cuerpos que broncean su piel bajo el sol.
¡Vaya estruendo! Es el ruido de un Boeing 747 que acaba de cruzar sobre mí. ¡Ah! Ese es el vuelo Río-New York. El vuelo 7806 de American Airlines. Lo reconozco por la hora que es y porque lo uso habitualmente cuando viajo a New York. ¿Quién pudiera ir ahora mismo montado en él? Ocho horitas y estaría en Time Square. ¡Bueno! Tampoco yo me puedo quejar. Corriendo, corriendo ya he pasado Ipanema y he llegado a Copacabana.
No sé... No sé... En todo esto que estoy viviendo falla algo. ¿Cómo puede ser que el avión haya cruzado la constelación de Cepheus? Cefeo para los amigos. Si Cefeo se encuentra en el hemisferio norte y Río en el hemisferio sur... Entonces una de dos: o el firmamento está hoy un poco trastocado o yo no estoy en Copacabana...
Ahora que me fijo bien, las luces de Corcovado no son otra cosa que la iluminación de la Alcazaba de Almería. Y esta playa... Vale sí, estoy entre la playa de La Térmica y la del Zapillo.
En cuanto al vuelo. Nada de American Airlines: más bien habrá sido Ryanair hacia algún destino europeo.
En cuanto al vuelo. Nada de American Airlines: más bien habrá sido Ryanair hacia algún destino europeo.
De nuevo la música que escucho me ha jugado una mala pasada. Esta vez ha sido culpa de la bossa nova. Otro día hablaremos de música.
miércoles, 18 de junio de 2014
Nada es para siempre
A
menudo hablo del "valor infinito del momento presente". Y sobre todo de
saborearlo lentamente si es bueno, porque en cualquier momento la vida
te puede traer un 1-5 e incluso te puede machacar después con un 0-2.
GRACIAS SELECCIÓN, por los buenos momentos que durante seis años nos has hecho pasar.
Mi hijos de corta edad, ya habían pensado que ESPAÑA siempre ganaba. También está bien, que hoy hayan aprendido que nada es para siempre: ni la victoria, ni la derrota.
GRACIAS SELECCIÓN, por los buenos momentos que durante seis años nos has hecho pasar.
Mi hijos de corta edad, ya habían pensado que ESPAÑA siempre ganaba. También está bien, que hoy hayan aprendido que nada es para siempre: ni la victoria, ni la derrota.
jueves, 23 de enero de 2014
Dónde estaba yo un día como hoy de hace 27 años.
Haciendo un poco de memoria, creo que el 23 de enero de 1987, algo después de medio día, me encontraba intentando escapar de una carga policial, por la Gran Vía madrileña. Y justo cuando pensábamos mis dos compañeros y yo que nos iban a zurrar de lo lindo (sin haberlo comido, ni bebido), pudimos meternos desesperadamente en el McDonald´s de la Gran Vía que hace esquina con la calle Montera. Justo a nuestro paso, los empleados del establecimiento, cerraron las puertas a cal y canto, para evitar que parte de la revuelta se introdujera en el restaurante. Salvados por fin en el último momento, desde la segunda planta del McDonald´s fuimos testigos del enfrentamiento entre policías y los llamados por entonces ultras.
Aquellos tres jovencísimos estudiantes venidos de una pequeña ciudad de Andalucía, no sabíamos que acompañados por un millón de alumnos, íbamos a protagonizar la histórica primera gran manifestación estudiantil de la democracia. El curso 86-87 fue un curso de intensa protesta estudiantil y también del profesorado. El alumnado durante meses realizó huelgas activas y encierros. Se pusieron en práctica los sistemas asamblearios de estudiantes, cuyas conclusiones acordadas en los distintos institutos, por pequeños que fueran, se comunicaban a la asamblea general. Todo un sistema de participación, el cual ha sido el modelo seguido por el pasado Movimiento 15-M.
Volviendo a ese día, todo transcurría con el mayor civismo imaginable dentro de una manifestación. Aún resuenan en mi cabeza aquellos cánticos: "El hijo del obrero... a la Universidad" o "Un bote, dos botes... Maravall el que no bote". Pero un grupo de individuos, entre los que se encontraba aquel personaje que se hiciera famoso por las imágenes que se difundieron por todo el mundo: "El Cojo Manteca"; irrumpieron al final de la manifestación y crearon el caos acompañados por la excesiva respuesta policial, que no discriminó a los pacíficos estudiantes de los desalmados.
Durante meses la lucha estudiantil fue intensa. Finalmente la LOGSE se aprobó y nos llegó la ESO. De todas estas revueltas, lo único excepcional que ocurrió fue la dimisión del ministro Maravall. Para aquellos lectores jóvenes, les explicaré que antiguamente los políticos que tenían una gestión no aprobada por la opinión de sus votantes, hacían uso de la cualidad de la honestidad y dejaban el puesto. Esta práctica hace mucho tiempo que se extinguió.
Ese día, en ese McDonald´s aprendí tres cosas importantes:
En primer lugar, descubrí que la política era otra cosa diferente a lo que nos habían contado. En los últimos años la mayor parte de los españoles lo ha sufrido.
Por otro lado, comprendí que si quería entender mínimamente el mundo, debería salir en la medida de lo posible de mi pequeña ciudad.
Y como última enseñanza y aunque parezca fútil, para mí fue la más importante: las hamburguesas de McDonald´s, en realidad son mucho más pequeñas que las que aparecen en las fotografías de la publicidad. Esto me enseñó que en el sistema económico actual: todo vale. El tiempo de la producción ha pasado para dar paso al tiempo de la comercialización. El concepto de Marketing explota en los ochenta y se instala en todas las áreas de la sociedad. La economía es el gran poder que directa o indirectamente controla a los demás poderes. El sistema es tan poderoso que lo único que le queda al individuo es sobrevivir.
A continuación se puede ver un interesante vídeo explicativo de tres minutos sobre lo que ese día ocurrió.
lunes, 20 de enero de 2014
Hacía tanto tiempo que no nos veíamos...
domingo, 22 de diciembre de 2013
Only Time
Frecuentemente tenemos la sensación de que poseemos mucho
de lo que nos rodea. Los objetos, un inmueble, el vehículo nos pertenecen.
Tenemos una factura o una firma ante notario que lo demuestra. Deja que llegue
una crisis económica o un accidente natural o fortuito.
Está claro que las personas que nos rodean no nos
pertenecen. Ellas o el Universo por
ellas, deciden estar junto a nosotros más o menos cerca, más o menos tiempo.
Me pregunto si hay algo que realmente nos pertenezca.
Me pertenezca.
Afortunado yo porque haya existido un nuevo último
viaje. Inma y los niños descansan en el apartamento al caer la noche y a mí me
gusta salir a perderme. Perderme por el barrio para observar sus gentes,
escaparates y fachadas. Perderme sin prisa entre las estanterías de sus
tiendas. Tiendas que aunque pequeñas esconden fabulosos secretos: con qué mimo
hay que tratar un negocio que disponga de más de veinte tipos de arroces
aromáticos venidos de distintas partes de oriente; todo un universo de comida
mexicana o china; la mayor colección vista por mí
hasta ahora de conservas vegetales y de
pescado llegados de cualquier parte del mundo; tomates de Spania a 7,95 NOK
(1 Euro) la unidad y tantos y tantos
productos que más que ultramarinos son trocitos de mundo.
En la calle nieva. Los copos no caen, sino que
flotan en el ambiente. Como si tuvieran todo el tiempo del mundo para llegar al
suelo. No tienen prisa. Tan sólo disfrutan el viaje. Como yo en esos momentos o
en otros durante el día: cuando los niños corren por la nieve; se tiran al
suelo para hacer el ángel y ríen. Juegan y no tienen prisa. Disfrutan el juego,
la nieve y la seguridad de sentirse
vigilados por sus padres. Tic, tac, tic, tac, el tiempo pasa. Son las 15:03 h. momento mágico en el que el sol se pone para dar paso a la noche.
Será que es el tiempo el único bien que nos
pertenece. Ese bien del que no tenemos ninguna firma, ni estado contable, pese a
pensar siempre que nos queda mucho o al menos el suficiente para vivir todo
aquello que siempre hemos querido vivir. Tic, tac, tic, tac, el tiempo pasa.
También he entrado en varios supermercados por el
mero placer de descubrir productos desconocidos para mí u observar cómo se
puede fusionar con suma sutilidad la tradición y la modernidad. Y mientras leía
etiquetas de productos llegados de Chile o Nueva Zelanda, recordaba un artículo que resumía el libro: Los cinco
mandamientos para tener una vida plena. Que no trata de otra cosa que de
arrepentimiento. Arrepentimiento sentido por personas que son conscientes de la
extinción de su vida y realizan un análisis final de la misma.
Se arrepienten de no haber sido fieles a sí mismos y
no haber cumplido gran parte de sus sueños; de haber trabajado muy duro dejando
pasar momentos importantes de su vida. Arrepentidos de no haber expresado sus
sentimientos a las personas que les rodeaban e importaban; complementado esto
último con no haber dedicado más tiempo a la amistad, a esos viejos amigos y
también a los nuevos y últimos. Estos cuatro arrepentimientos en el fondo se
resumen en el quinto:
No haberse dejado a sí mismos ser más felices.
Con tanta
restricción autoimpuesta han estado engañados al pensar que la felicidad aparecerá algún
día por la esquina y se han quedado en el banco de la espera: han dejado de tomar la elección vital de ser felices.
Porque la felicidad puede ser una elección.
Dicen que paja en ojo ajeno no molesta. Pero es
inteligente intentar aprender al máximo de lo que le acontece a los demás.
Mientras disfrutaba de todos estos momentos de novedades y
pensamientos recordaba a las personas que aunque lejos, siempre están. Y también a las que me hacen el día a día más fácil, más
ameno, más humano. En ese momento se me estaba ocurriendo este escrito al que pensaba
titular: From Oslo with love. Finalmente ha ganado la idea que
frecuentemente comento: el valor infinito del momento presente. El valor del
tiempo. Y la elección de lo que hacer con ese tiempo.
Only Time.
lunes, 25 de noviembre de 2013
Esa delgada línea roja
Siempre he pensado que la vida discurre serpenteante sobre una delgada línea. El decurso de los hechos se debate entre su existencia y la contraria. Lo que no ocurre, ya ha ocurrido u ocurrirá en otro universo que ya no será éste, sino otro de los infinitos que forman el Multiverso.
¡Lástima que la materia no tenga memoria!
O tal vez: sí la tenga...
martes, 8 de octubre de 2013
Museo a pie de calle
El otro día me sorprendió el sonido de mis pasos que resonaba por las calles del casco antiguo de la ciudad que me vio nacer: Linares. Soledad acompañada del sonido de la tranquilidad; de una temperatura de equinoccio que te hace dudar si te encuentras en primavera o en otoño.
Y allí estaba yo, acompañado del arte que perdura en la arquitectura de antiguas casas palaciegas, como las de Zambrana, Orozco, Dávalos...
Y también rodeado de ese arte efímero frente al anterior y que da expresión a jóvenes armados con sprays: graffitis.
No me refiero a los graffitis a los que estamos acostumbrados y que degradan la ciudad a un paisaje deshumanizado...
Me refiero a auténticas obras de arte.
Arte que mezcla la caricatura, el hiperrealismo y la crítica social.
Entre tanto arte pictórico. También poesía.
Poesía que merece un post aparte: el siguiente.
martes, 1 de octubre de 2013
domingo, 15 de septiembre de 2013
domingo, 28 de julio de 2013
viernes, 26 de julio de 2013
miércoles, 10 de julio de 2013
opĭum
En el siglo XIX un filósofo dijo que "la religión era el opio del pueblo".
Si analizamos el siglo XX y lo que llevamos del XXI, aparte del fútbol, el opio del pueblo es la política.
Religión y política se parecen bastante: a alguien que está en otra dimensión, le pides que te haga más fácil la vida. Y crees que si no lo hace ahora, ya lo hará en el futuro.
Si analizamos el siglo XX y lo que llevamos del XXI, aparte del fútbol, el opio del pueblo es la política.
Religión y política se parecen bastante: a alguien que está en otra dimensión, le pides que te haga más fácil la vida. Y crees que si no lo hace ahora, ya lo hará en el futuro.
martes, 9 de julio de 2013
SOBREVIVIR
Parece ser que vivir, pese a ser bonito: es un poco complicado. De hecho, no conozco a nadie que haya sobrevivido a su propia vida.
lunes, 8 de julio de 2013
If Not For You
Todo el mundo necesita que de vez en cuando alguien le diga:
If Not For You
If not for you,
Babe, I couldn't find the door,
Couldn't even see the floor,
I'd be sad and blue,
If not for you.
If not for you,
Babe, I'd lay awake all night,
Wait for the mornin' light
To shine in through,
But it would not be new,
If not for you.
If not for you
My sky would fall,
Rain would gather too.
Without your love I'd be nowhere at all,
I'd be lost if not for you,
And you know it's true
If not for you
My sky would fall,
Rain would gather too.
Without your love I'd be nowhere at all,
Oh! What would I do
If not for you.
If not for you,
Winter would have no spring,
Couldn't hear the robin sing,
I just wouldn't have a clue,
Anyway it wouldn't ring true,
If not for you.
If not for you.
If not for you.
If Not For You
If not for you,
Babe, I couldn't find the door,
Couldn't even see the floor,
I'd be sad and blue,
If not for you.
If not for you,
Babe, I'd lay awake all night,
Wait for the mornin' light
To shine in through,
But it would not be new,
If not for you.
If not for you
My sky would fall,
Rain would gather too.
Without your love I'd be nowhere at all,
I'd be lost if not for you,
And you know it's true
If not for you
My sky would fall,
Rain would gather too.
Without your love I'd be nowhere at all,
Oh! What would I do
If not for you.
If not for you,
Winter would have no spring,
Couldn't hear the robin sing,
I just wouldn't have a clue,
Anyway it wouldn't ring true,
If not for you.
If not for you.
If not for you.
domingo, 7 de julio de 2013
martes, 2 de julio de 2013
GRADOS DE HUMANIDAD
—Si te dijera que conozco a una persona en la que se puede confiar y que además se entrega a los demás. ¿Qué me dirías?
—Pensaría que es una persona muy humana.
—Y si te digo que conozco a otra que es envidiosa e hipócrita.
—¡Esa! ¡Esa sí que es realmente humana¡
—Pensaría que es una persona muy humana.
—Y si te digo que conozco a otra que es envidiosa e hipócrita.
—¡Esa! ¡Esa sí que es realmente humana¡
lunes, 13 de mayo de 2013
SIN TÍTULO
Han pasado más de dos meses desde que escribí la última entrada y no ha sido por falta de temas. Pero hoy ya me he visto obligado a expresarme debido a que...
... desde hace varias tardes y noches me resulta muy triste bajar la basura.
Recuerdo ese famoso documental titulado "La Isla de las Flores". Se puede ver aún en YouTube. Trata de unos niños que acuden a un vertedero de basura para subsistir.
Desde hace varias semanas, al llegar a los contenedores de la basura, me encuentro personas abriendo las bolsas de dentro. Algunas de estas personas me preguntan por lo que voy a tirar, por si les sirviera de algo. Me preguntan también si llevo ropa.
Se acercan a mí y no me infunden miedo: son personas educadas. Les veo y pienso en la ilusión óptica que generan los distintos gobiernos dando continuos plazos que nunca se cumplirán.
Hoy ya me he visto obligado a escribir. A los contenedores ha llegado un hombre en bicicleta. Junto a él, en otra bicicleta muy pequeña le sigue un niño de unos cinco años. El pequeño observa atento cómo su padre remueve las bolsas de los distintos contenedores.
Parece ser que este niño es uno entre los millones que van a pagar con su vida la deuda contraída por otros para el disfrute de los mercados.
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